Datos de la ruta

  • Desnivel Máximo: null
  • Duración de la ruta: 4h
  • Distancia de la ruta: 10 Km
  • Tipo de ruta: Lineal
  • Dificultad: Alta

En esta ocasión nos vamos a la Sierra de la Contraviesa, concretamente a Sorvilán.
Vamos hacer hoy el Barranco sin agua del Valenciano y contamos con un coche de apoyo. Así que nos dejan en Sorvilán, en la Venta de San Marcos (carretera A-4131) y andamos dirección Albuñol unos doscientos metros, a nuestra izquierda sale un carril que nos lleva a la Rambla de Alfornón.
Pulsa sobre el titular, para leer el resto del texto
La bajada es cómoda y está llena de flores. Las abundantes lluvias de este año, hace que esta primavera este todo reluciente y multicolor.
Una vez en la rambla, los dos primeros kilómetros se hacen sin más, casi parece que andamos por una pista y en un punto determinado nos adelanta un coche.
Cuando llevamos algo más de tres kilómetros hay una presa, aquí comienza la rambla del Valenciano. Hay una traza por la derecha, que con mucho cuidado te hace descender.
Algo más de un kilometro, aparece otra presa con la misma dificultad y descendemos de la misma manera a la anterior. A partir de aquí, la rambla cambia su fisonomía. Se estrecha y nos hace trepar entre montículos de piedra. Hay que descender varias veces con cuerda (la nuestra era de 25 metros).
Sin material para el descenso, sería imposible poder seguir. Vamos encontrando restos de material oxidado y en malas condiciones. Recuerdo cuando hicimos este barranco en ascenso en el 2007, que se encontraba equipado y facilitaba cruzar estos saltos complicados, pero actualmente los cables de acero unidos entre sí por perrillos encadenados están muy deteriorados y de dudosa fiabilidad.
Los barrancos de escorrentía, son muy cambiantes al llevar agua solo en épocas de lluvia y suelen llevar mucho caudal. Por lo que este barranco actualmente se puede descender sin problemas si llevas material, pero no está preparado para hacerlo a la inversa. Lo mejor del barranco son los tres últimos kilómetros, es la zona más angosta, las formaciones son impresionantes.
Los paredones por los laterales son de casi quinientos metros en vertical, es sorprendente caminar por esta zona abrupta y con el sonido de las aves. La última dificultad es un rapel de unos 10 metros, en plena cantera. Se nota que ha habido explosiones recientes, esta todo cubierto de varios centímetros de polvo.
Desde este lugar y por el camino dejado por las maquinas llegamos al Puente del Cantor. El Lugar donde nos recogen y nos llevan de vuelta a casa.